Zumo de paradojas
A los liberales del PP (los ultraliberales miran para otro lado) se les ha ocurrido, además de hacer zumo, dos soluciones para la crisis citrícola, a cual más intervencionista. La primera, que el Gobierno, que para eso es socialista, compre 200.000 toneladas de naranjas para dar de comer a los cerdos y que así suban los precios en el campo. La segunda, que la Unión Europea prohíba plantar más naranjos, porque sobra producción.
El Gobierno socialista, siempre dispuesto a echar una mano al cuello, ha contestado que no puede comprar y retirar naranjas porque lo prohíbe la UE (y ustedes no son Endesa, le ha faltado decir) y que limitar la producción lo ve poco factible en la actual Europa capitalista, como si no se hubiera hecho con la leche, el vino, el trigo, el arroz... Y así están: el PP, quejándose de que el libre mercado no funciona (el otro día vi mandarinas a 1,65 euros el kilo, cuando en el campo se paga a 0,25); el PSOE, escudándose en la liberal (cuando le da la gana) Europa; los citricultores arruinados, y los consumidores, sin notar la crisis.
Javier Alfonso, hoy en
20minutos
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