lunes, diciembre 11, 2006

La cultura del pacto

El espectáculo ha sido penoso. Se ha demorado tanto el acuerdo que no sólo se han deshilachado muchas ilusiones cívicas sino que han traslucido los más obscenos sectarismos depositados como un óxido en los engranajes de todas y cada una de las versiones de la izquierda autóctona, sea ésta comunista, nacionalista, alternativa o ecologista. Para llegar a la clamorosa evidencia de una concertación electoral sin la cual no habría auténtico pulso en los comicios autonómicos del 2007, Esquerra Unida y el Bloc Nacionalista Valencià han tenido que exhibir todas su vergüenzas. Sin embargo, casi dos décadas después de su frustrado primer intento, vuelven a la cultura del pacto, por la senda de la coalición electoral, que es como decir que regresan a la cordura. Más vale tarde que nunca.

Sigue leyendo a Adolf Beltran, hoy, en El País.