Blasco consigue un titular
El conseller de Inmigración, el incombustible Rafael Blasco, lleva un año buscando salir en los periódicos. Desde que le apartaron de Territorio, donde contribuyó de forma decisiva al caos urbanístico, y después de Sanidad, donde se dedicó a buscar casos raros para salir en la tele, Blasco ha intentado por todos los medios recuperar protagonismo. Se pirra por salir en la tele y en los periódicos.
Camps lo apartó del foco mediático con una consellería sin presupuesto conocido, pero no se atrevió a pulírselo, vete a saber por qué. Pero Blasco no se resigna y tiene en funcionamiento una enorme maquinaria para seguir en el candelero. Desde un gabinete de prensa agobiante (que según me dicen llegan a pedir a los medios, imagino de que de coña, que saquen sus noticias porque si no los despiden) hasta un espacio pagado en los informativos de Canal 9 (La notícia solidària, un trocito de telediario en el que siempre sale el conseller). Este miércoles lo consiguió con su ocurrencia del "compromiso de integración".
Cuentan las lenguas viperinas, malvadas, rojas y judeomasonas que la parida (perdón por la vulgaridad) ha pillado desprevenidos a Camps y su entorno más próximo y que no les ha hecho mucha gracia. No porque no compartan el discurso que lanzó Rajoy en las elecciones (el examen de españolidad). Lo que les fastidia es esa metida de pata, por lo inútil de la propuesta y por su tinte xenófobo, y porque desvía el discurso de acoso a Zapatero que tiene en marcha Camps y que en realidad es una excusa para posicionarse en el partido (¿Os he contado que lo que dicen es que Camps aspira a recuperar la figura del vicepresidente del PP para estar al acecho por si Rajoy se va?).
Pero ahí está la ocurrencia de Blasco. No les queda otra que seguir el juego y preparar esa ley de inmigración de la que habló el conseller y de la que no hay ni una línea escrita. Mientras, preguntémonos: ¿Se aplicará ese compromiso de integración a los ingleses, alemanes, suecos o noruegos que viven en Xàbia, Altea o Benidorm en urbanizaciones privadas y excluyentes? ¿O sólo a los marroquís, senegaleses, colombianos o ucranianos? Mientras esperamos la respuesta, deleitémonos con la foto que hoy ha recuperado el diario Público (enlace a la edición en pdf, la foto en la página 26). Camps, de moro (¿comprometido?), en las fiestas de Alcoi en 2004.
Camps lo apartó del foco mediático con una consellería sin presupuesto conocido, pero no se atrevió a pulírselo, vete a saber por qué. Pero Blasco no se resigna y tiene en funcionamiento una enorme maquinaria para seguir en el candelero. Desde un gabinete de prensa agobiante (que según me dicen llegan a pedir a los medios, imagino de que de coña, que saquen sus noticias porque si no los despiden) hasta un espacio pagado en los informativos de Canal 9 (La notícia solidària, un trocito de telediario en el que siempre sale el conseller). Este miércoles lo consiguió con su ocurrencia del "compromiso de integración".
Cuentan las lenguas viperinas, malvadas, rojas y judeomasonas que la parida (perdón por la vulgaridad) ha pillado desprevenidos a Camps y su entorno más próximo y que no les ha hecho mucha gracia. No porque no compartan el discurso que lanzó Rajoy en las elecciones (el examen de españolidad). Lo que les fastidia es esa metida de pata, por lo inútil de la propuesta y por su tinte xenófobo, y porque desvía el discurso de acoso a Zapatero que tiene en marcha Camps y que en realidad es una excusa para posicionarse en el partido (¿Os he contado que lo que dicen es que Camps aspira a recuperar la figura del vicepresidente del PP para estar al acecho por si Rajoy se va?).
Pero ahí está la ocurrencia de Blasco. No les queda otra que seguir el juego y preparar esa ley de inmigración de la que habló el conseller y de la que no hay ni una línea escrita. Mientras, preguntémonos: ¿Se aplicará ese compromiso de integración a los ingleses, alemanes, suecos o noruegos que viven en Xàbia, Altea o Benidorm en urbanizaciones privadas y excluyentes? ¿O sólo a los marroquís, senegaleses, colombianos o ucranianos? Mientras esperamos la respuesta, deleitémonos con la foto que hoy ha recuperado el diario Público (enlace a la edición en pdf, la foto en la página 26). Camps, de moro (¿comprometido?), en las fiestas de Alcoi en 2004.
3 Comments:
Estimado amigo,
Lamento comunicarte que no sólo hay líneas escritas sobre la dichosa Ley de Ingración del Inmigrante, que así parece que se va a llamar, sino que mis ojos ya han visto el quinto borrador. Si no fuera porque la fuente exige discrección, tel a enviaría gustoso.
Un saludo.
Anónimo no se puede tirar la piedra y esconder la mano. Ahora nos quedamos todos con ganas de más. Podrías contar algo, sin dejar al aire a tu fuente.
Agrónomo, el problema es que hay mucha "garganta profunda" y pocos datos fiables.
Publicar un comentario
<< Home