El mundo no es suficiente
“Ve a Valencia, que allí te lo compran todo y pagan una pasta”, le dijo el de la Esfera Armilar al del Museo de la FIFA, proyectos ambos dos por los que hemos pagado una pasta pero de los que nada sabemos (gracias a Dios, añadiría yo).
“Ve a Valencia, que allí te lo compran todo y pagan una pasta”, le dijeron a Bertarelli y así acabó aquí la Copa del América.
“Ve a Valencia, que allí te lo compran todo y pagan una pasta”, le dijo Bertarelli a Ecclestone que, primero, hizo un test de la capacidad de aflojar la mosca de este Gobierno y envió a McLaren a presentar el equipo, para después sacarnos la pasta con la carrera anual.
“Ve a Valencia, que allí te lo compran todo y pagan una pasta”, le dijo un auténtico desconocido a la distribuidora en España de Quantum of Solace, la última de Bond que se presenta hoy en Valencia a nivel… de España. Oficialmente, la broma nos cuesta unos 100.000 euros. Oficiosamente, vayan a saber ustedes.
Somos los primos del mundo del espectáculo.
“Ve a Valencia, que allí te lo compran todo y pagan una pasta”, le dijeron a Bertarelli y así acabó aquí la Copa del América.
“Ve a Valencia, que allí te lo compran todo y pagan una pasta”, le dijo Bertarelli a Ecclestone que, primero, hizo un test de la capacidad de aflojar la mosca de este Gobierno y envió a McLaren a presentar el equipo, para después sacarnos la pasta con la carrera anual.
“Ve a Valencia, que allí te lo compran todo y pagan una pasta”, le dijo un auténtico desconocido a la distribuidora en España de Quantum of Solace, la última de Bond que se presenta hoy en Valencia a nivel… de España. Oficialmente, la broma nos cuesta unos 100.000 euros. Oficiosamente, vayan a saber ustedes.
Somos los primos del mundo del espectáculo.
posted by Sol solet at 5:32 p. m.
3 Comments:
Lo peor de todo es que este tipo de "tácticas" son la mar de usuales en todas las ciudades y países, yo te pago si tú presentas tu producto, si tú ruedas en mi ciudad, etc, etc, pero en la Comunidad Valenciana parece ser el único lugar donde pagamos por trae cosas malas y petardas, y sin repercusión real (ni económica ni a nivel social).
Todas estas presentaciones pueden repercutir muy bien en la llamada "marca de ciudad" (excusa con la que justifican nuestros políticos estas actuaciones) pero al final sólo repercuten en un par de empresas y en un par de manos.
Sigamos así.
"Lo que haga falta" (Rita Barberá, visita papal 2006). Podria haver afegit: "Dios os lo pagará."
Monorail!
Monoraiiil!!
Mo-no-ra-iiiiiiiiiiiil!!!!!
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